Fue el grito revolucionario que se escucho en todos los ámbitos culturales del mundo durante los movimientos estudiantiles de 1968.

Pero de ahí en adelante, fuera de algunas “performances” o instalaciones “a la moda”, el arte continúa perteneciendo a sus tradicionales santuarios: las galerías y los museos, en los que los hierofantes –los curadores, marchands y críticos- definen tendencias, ungen elegidos y asombran a la créme de la créme recomendando y vendiendo los últimos gritos del “medio”, tal y como sucedía en el siglo XVIII, cuando la burguesía ascendente coleccionaba arte para emular a los aristócratas de su época.

Por eso, cuando una organización como RAE INGENIEROS S.A. toma la iniciativa de “sacar el arte a la calle”, estamos ante una visión única, no sólo porque es la primera vez que un grupo de ingenieros involucra artistas en su quehacer, sino porque es la primera vez que una empresa afana en establecer alianzas estratégicas con otras empresas para apoyar a veintitrés artistas contemporáneos con la misma finalidad: que el gran público conozca y aprecie las diversas expresiones plásticas de un grupo representativo del arte costarricense.

Grupo Roble, EPSON, SUR y EUROTOLDOS son los socios que se han comprometido activamente a secundar la iniciativa. Gracias a su empeño, más de ochenta mil personas por semana -el promedio de visitantes de MULTIPLAZA ESCAZÚ, el centro comercial anfitrión- se asombrarán ante una muestra de arte inusual, en la que los andamios de más de ocho metros de alto que comúnmente están cubiertos de cemento y restos de pintura, exhibirán ahora veintitrés lienzos de gran formato de artistas contemporáneos y cuatro lienzos que los niños pintarán junto a ellos.

El programa RAE POR EL ARTE no sólo es innovador en su enfoque empresarial, sino que trasciende su objetivo primordial, el de cubrir con arte la labor de construcción, y plantea una oportunidad para los artistas y el gran público: la de compartir su espacio y su percepción del mundo.

Este encuentro contiene más potencial por sus características temporales que cualquier esfuerzo muralístico, que es permanente. ¿Por qué? Porque genera una búsqueda dinámica de alfabetidad visual que genera una relación interactiva entre público y artistas, entre los estímulos visuales y el poder conformador de las técnicas.

En este primer esfuerzo, RAE POR EL ARTE permite al gran público ponerse en contacto con “una visión directa de la realidad”, como diría Bergson, de “su realidad”, acrecentamos nosotros. Porque ese enorme despliegue de fórmulas visuales influencia directamente la inteligencia visual del observador, ya sea con una expresión realista, abstracta o simbólica, y le pone en contacto con su identidad, con la manera en que los costarricenses ven y entienden el mundo.

“Oh, wad, concédenos algún poder para vernos como otros nos ven”, ruega Robert Burns. Y la expresión visual responde con sus vastos poderes. Sí, porque esta muestra no tiene labor curatorial elaborado en santuario ni pretende otra cosa sino ser un reflejo del contenido y la forma de lo que esta sociedad articula como la información representacional de lo que significa vivir aquí.

Demos entonces la bienvenida a este nuevo espacio que RAE POR El ARTE nos abre para compartir el proceso y la circunstancia de la expresión artística nacional sin referencias pretenciosas al high art  o a los festivalismos internacionales.

Agradezcamos la oportunidad que nos brinda de acercarnos todos, a través de las artes plásticas, a los valores culturales de este país, ya que sólo la experiencias visual, por su naturaleza directa, nos proporciona el vínculo más estrecho con la realidad de nuestro entorno

Marcela Valdeavellano

Consultora en Mercadeo Estratégico aplicado a las Artes del Master Internacional en Turismo de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, España 

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